Paz en Medio de la Tormenta

  Al pasar de los años, la gran mayoría de los seres humanos, tendremos cicatrices. Unas físicas a causa de alguna enfermedad o padecimiento. Otras emocionales y del corazón a causa de algún desengaño o sufrimiento que nos quita la paz mental. Las primeras, o sea, las físicas permanecerán en nuestro cuerpo como un recuerdo de un evento positivo o negativo. Por ejemplo, las cicatrices que pueden dejar una operación o nacimiento de un hijo son positivas. Cada vez que las vemos o tocamos nos recuerdan ese momento. Por otro lado, si fue causada por un accidente o hecho violento, cada vez que las miremos nos vendrá a la memoria como algo negativo. Ahora, las segundas cicatrices , las emocionales o del corazón , esas son más difíciles. ¿Por qué? Porque las sentimos en lo más profundo de nuestro ser y no podemos verlas a simple vista. No podemos vendarlas ni añadirle algún ungüento, las guardamos para que nadie las pueda ver y nos hacen daño.   Entonces, ¿qué hacemos? Debemos entregarlas a D

  “Cuando la marea esté más baja, es que ya va a cambiar su nivel.” (Henry Wadsworth Longfellow)

  Muchas veces en la vida nos enfocamos en el punto lejano. Ese punto que no nos deja apreciar y reconocer el punto cercano. En ocasiones nos enfrascamos en ideas erróneas pero que creemos son las correctas. La vida nos ofrece oportunidades reales y cuando menos lo esperamos utiliza métodos o personas que nos abren los ojos para seguir el camino hacia esas nuevas oportunidades. Doy gracias a Dios por esas personas presentes en nuestras vidas.  (Escrito por: Rita E. Rivera Aponte)

 "Cuando el amor y la experiencia operan juntos, anticipa una obra cumbre." (John Ruskin) Algunas veces parece que el progreso nos evade, pero Dios es fiel para continuar la buena obra que Él ha comenzado en cada una de nuestras vidas. Si abrimos los ojos del corazón , veremos Su mano obrando en nosotros. (Amanecer con Dios)

  Considero que es sumamente importante que como personas responsables y de principios reconozcamos el valor de nuestro HOGAR . El hogar es ese lugar donde podemos ser nosotros mismos, donde podemos sentir el calor y amor de nuestra familia. No siempre todo será color de rosa, pero no importa las situaciones, siempre habrá comprensión y perdón. Es donde desde pequeños nos enseñaron el valor de pertenecer a una familia y amar a Dios. Ese lugar, que, aunque estemos lejos, siempre añoramos volver. Ese lugar donde los hermanos tienen sus diferencias, pero a lo largo del tiempo reconocen su amor. Más aún, donde nuestros padres merecen nuestro respeto no importa la edad que tengamos. Ama tu hogar, ama tu familia tal como es. Al final, tú también formarás un hogar y las raíces que te formaron serán la base para que este se sostenga. Las casas son estructuras físicas. Los hogares son refugio y oasis para los que en verdad saben apreciarlos. ¡Confía a Dios tu hogar! ¡Ama tu hogar!     (Escrito