Es hora...
Es hora de cambiar de táctica. Es hora de poner el combate en Mis Manos. Cada vez que sientas dolores o molestias, vuélveme el corazón en oración. Cada vez que te sientas desmoralizado o contrariado, convierte tus pensamientos en plegarias. Si te sientes confundido o te invade el temor, pon tu mano en la Mía. Encomiéndame tus inquietudes, y YO te concederé paz interior. (En el atardecer de la vida) Clama a Mí en el día de la angustia. Yo te libraré del peligro y tú Me honrarás. Salmo 50:15