Carta a mis hijos (Por: Rita E. Rivera Aponte)

A mis hijos:

Con amor cada uno de ustedes fue concebido. Por amor a cada uno me cuidé durante su espera. Con amor fueron recibidos y criados. Fueron nueve meses de espera, un período de alegría y gozo porque los sentía latir cada día dentro de mí. Cada movimiento era una sensación de vida, esperanza y amor. Cuando llegó el momento de que vieran la luz del mundo sentí muchos dolores, pero cada uno de ellos quedó en el olvido en el mismo instante en que los tuve en mis brazos. Sentirlos, tocarlos, verlos, escuchar su llanto, revisar cada dedito de sus manos y pies fue la felicidad más grande que he sentido en mi vida.

He disfrutado cada etapa de sus vidas. Su infancia, niñez, adolescencia, juventud y ahora como adultos. Cada uno de ustedes es una muestra del amor de Dios hacia mí. Estoy súper orgullosa de cada uno de ustedes, son hijos maravillosos, pero más aún son hijos de Dios, ciudadanos responsables y sensibles. Dios me bendice cada día con el amor de ustedes. Gracias por su amor y por aceptarme tal cual soy.

Hoy, Día de las Madres, quiero que sepan que los amo y que siempre pueden contar con mi amor sin condiciones. No importa la circunstancia, siempre estaré ahí para cada uno de ustedes. ¡Dios me los cuida y protege siempre!

Con todo mi amor, Mami

El Señor vino a nosotros desde muy lejos diciendo: "Yo te he amado con un amor que no se acaba. Por eso, con misericordia te he ayudado para que vengas a Mí." Jeremías 31:3