¿Por qué tanta prisa? - Rita E. Rivera

La palabra de Dios está clara, todo tiene su tiempo y el tiempo de Dios es el tiempo de Dios, no nuestro tiempo. La mayoría de las veces nos pasamos la vida corriendo...queremos hacer todo en nuestro tiempo sin contar con el tiempo de Dios para nuestras vidas. Si estuviéramos atentos a la voz de Dios y qué es lo que quiere para nosotros, la vida sería menos complicada. Cada mañana, cada noche, cada día debemos llevar todo en oración a Dios. Él nos guiará y nos contestará cada oración a su tiempo y según su voluntad porque Él sabe lo que nos conviene y en el tiempo que estamos listos para ello. Tenemos que depender más de Él, tenemos que dejar que verdaderamente Él tenga el control de nuestras vidas. Permite que Dios te muestre las bendiciones y maravillas que tiene para ti en su tiempo.

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